De Selfies, ombliguismo y “after sex“

De Selfies, ombliguismo y “after sex“

De Selfies, ombliguismo y “after sex“

El onanismo fotográfico continúa imparable. Si en 2013 “selfie” se convirtió en la “palabra del año”, el boom de las auto-fotos no para de crecer. Tras el “pediselfie”, el “donut selfie” o “la boca de pato”,  la última revolución de los Instagramers tiene que ver con dar bombo y platillo al “after sex”.

No, no teníamos bastante con imágenes de vidas imposibles llenas de lujo y glamour compartidas a diestro y siniestro en la  blogosfera, Internet y la madre de todas las santas redes sociales para recordarnos a nosotras - ¡oh, pobres mortales!- , que hay quien vive muy por encima de nuestras posibilidades. 

Selfies hasta en la sopa. En la playa luciendo pies, en el balcón “sencilla y natural”, o con boca de pato o pez. Todo está permitido en el universo Instagramer.

No. Ahora, lo más de lo más, lo último de lo último, lo más trendy del universo mundial, tenía que ser, precisamente compartir esos momentos postcoitales… Imágenes de caras satisfechas y sábanas revueltas, que sin complejo ni pudor, se comparten tras un hashtag globalizado. 

Selfies After Sex, la moda de fotografiarse después del sexo vista con una de las parejas más famosas de todos los tiempos: Barbie y Ken, ¡tan adorables!

Instagram, la red social que popularizó las cómicas caras de pato o de pez, continúa reinventándose cada día con nuevas tendencias que siguen alimentando el ego diario de propios y ajenos. La última vuelta de tuerca tiene que ver con compartir un selfie justo después de hacer el amor. Muchos famosos no han tardado en apuntarse a la tendencia de moda como Miley Cyrus o Justin Bieber y tras ellos, al calor del momento, muchos no han tardado en sumarse a una de las tendencias más in de la temporada.

No hay fashion victim o celebrity de mercadillo que no se precie de seguir a pie juntillas las tendencias

                         

                       

Una imagen vale más que mil palabras, ¿no? Pues eso :)

No se trata de ponerse tremenda a lo Escarlata O'Hara con lo de “Mañana será otro día”, pero sí que merece la pena plantearse que las Redes Sociales pasan factura. O al menos, pueden hacerlo y la vida, tiene la mala costumbre de dar muchas vueltas. Que está muy bien eso del goce y del disfrute. Sin trabas y sin cortes, qué faltaría más tras años de liberación sexual y tal y cual… Lo malo, lo único malo, es que si te entretienes en cotillear las más de 67.000 fotos publicadas al respecto, igual, tenemos que volver a hablar del postureo y puede que cierta irreflexión.

Y es que ahora no hay fashion victim o celebrity de mercadillo que no se precie de seguir, literalmente y a pie juntillas, las tendencias. Pero atención, chicas, sin etiquetas, ni moralismos, qué tal si en lugar de dejarnos llevar por el subidón post coital, le damos una vuelta y pensamos en qué puede pasar mañana. Que esta moda no se trata, precisamente de poner morritos o posar sencillas-pero-espectacular a los pies de una ventana.

Está claro que las riendas de tu vida son tuyas y tú decides cómo, cuándo, dónde y, por supuesto, con quién. Lo único, antes de actuar, párate un segundo y piensa si ese capricho  de ahora, igual mañana te da dolor de cabeza. Afortunadamente existe el “derecho al olvido”, también en Internet, pero de eso… hablaremos otro día. 

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Este artículo lo ha escrito...

Ara Gálvez

Ara Gálvez (Badajoz, 1975) es licenciada en Comunicación Audiovisual, Publicidad y Relaciones Públicas y master en “enredismo”.  Lo mismo la encuentras  dándole al corte y confección que... Saber más...