Toda madre reciente sabe que la leyenda urbana de que nunca se tienen suficientes bodies y pijamas es totalmente cierta, y que las tartas de pañales es un regalo que además de ser muy pintón te salva el mes de su compra, pero ¿quién se acuerda de la pobre madre? Esa pobre parturienta que entre sangre y terribles dolores ha traído a ese bebé tan mono que todo el mundo manosea y con el que se sacan fotos. Esa bomba de relojería llena de hormonas e inseguridades que trata de equilibrar el entregado amor por su hijo con una leve sombra de lo que su vida fue, que lucha por ducharse una vez al día y agradece las sobras de comida que le traen en tupper porque no tiene tiempo ni de cocinar pese a estar todo el día en casa. Para ella, para tu amiga del alma que ha traído a este mundo a tu nuevo bebé preferido, solo para ella, estos regalos salva-autoestima que harán que se le llenen los ojos de lágrimas cada vez que recuerde la primera vez que fuiste a visitarla después de dar a luz.

Devuélvela las manos

Lo que más echa en falta una madre recién estrenada no es su figura pre-embarazo, ni su zona pélvica sin costuras, lo que realmente echa de menos son sus manos. Un bebé recién nacido es demandante y salvo que seas de la cruel escuela Stivill, si llora, cosa que hacen a menudo, lo tendrá en brazos, lo que la imposibilita usarlas para cualquier cosa que no sea acunar al bebé. Si a esto añadimos que tu amiga nunca ha sido capaz de llevar una bufanda con estilo y que los portabebés en mochila están pensado para niños más mayores, tenemos el regalo definitivo para que pueda volver de nuevo a disponer de sus manos en su casa: la Camiseta Marsupial. Es una camiseta que dispone de portabebés incorporado (hasta 7 kilos del mismo, tiempo suficiente para que se vaya organizando o se saque un máster en porteo) con la que puede llevar a su niño agustito para que no llore y ella se sienta aún como embarazada, que es el último estado fisiológico que su cuerpo recuerda.

No garantizamos que vayas a estar así de buena a los diez minutos de dar a luz, pero el negro adelgaza, piénsalo así

Bolas chinas

El día que descubriste que el suelo pélvico no es un tipo de tarima del Leroy Merlin, tu vida cambio. Las amenazas de hacerse pis cuando se estornuda y la escasez de relaciones sexuales durante la cuarentena hacen de este producto un regalo estrella. Permite que tu amiga ejercite sus músculos vaginales a la vez que se lleva una alegría inesperada. Es tan fácil ser una buena amiga...

No, no son estas bolas a las que nos referimos...

Servicio doméstico

Menos camisetitas de star wars para el niño y más poner un bote y que un servicio de limpieza pase por su casa a echarle un cable en aquellas cosas en las que la pareja no ha podido organizar los primeros días como padres. El tener la casa limpia y ordenada ayuda a la salud mental y los padres recién estrenados te estarán agradecidos eternamente.

Pack de embutidos

El famoso efecto jamón, por el cual nunca le has hecho caso a ningún producto noble o innoble del cerdo hasta que te quedas en estado de buena esperanza. Como no hayas pasado la toxoplasmosis, se desarrolla una ansiedad por los productor cárnicos cosa muy loca, actualmente hay empresas que preparan packs para madres con ibéricos de toda clase para que incluso en el mismo hospital se saque la espinita de los nueve meses anteriores.

Nunca un cerdo te pareció tan apetecible como después de dar a luz, os lo aseguramos

Peluquería/manicura a domicilio 

Puede que tu amiga no tenga tiempo ni ganas de irse dos horas a la peluquería, pero seguro que se mira en el espejo y se queja de lo crueles que han sido las hormonas sobre su lucida melena. Busca una empresa de peluquería o manipedi a domicilio y en vez de ir a su casa a gorronear cerveza y hacer el enésimo sanedrín pediátrico sobre el bebé, organiza (con su consentimiento, claro) una sesión beauty en su casa, para que pueda sentirse más guapa sin prescindir de su pijama y de tener a su bebé en brazos.

El pelo de una madre recién levantada. Una historia real

Tiempo

Igual una madre reciente no tiene ganas (o sí, vete a saber) de dejar a su hijo en otras manos, pero ofrecerte a quedarte al cuidado de su bebé mientras ella se toma algún rato para ella, un baño largo sin interrupciones, responder a las llamadas de teléfono de felicitación por la reciente maternidad o leer un rato un libro sin tener una teta fuera pueden ser pequeños momentos que cobran especial magnitud cuando de una madre se trata. Ayudar con alguna tarea del hogar como lavadoras o lavar los platos en estos momentos de reajuste, pueden salvar más vidas que el samur.

Productos de belleza recovery

Siempre dependiendo de la confianza que se tenga, una cesta de regalos para un buen recovery físico es una genial idea. Si se tiene confianza con la recién parida y sabiendo que no se va a tomar a mal un producto antiestrías o una mascarilla para pelo apagado pueden iluminarle los ojos. Una cestita de cosas solo para ella puede hacerla muy feliz.