Dallas Buyers Club: Historia de dos actores

Por Javi DC

Dallas Buyers Club: Historia de dos actores

Mucho se ha hablado de Leonardo Di Caprio y su NO Oscar en la última entrega de premios de la academia. Pero después de ver Dallas Buyers Club, está claro que el galardón era para nuestro íntimo amigo Matthew McConaughey. ¿Merecía más premios esta película? Os lo contamos.

Era la única de las grandes favoritas de los pasados Oscars por estrenarse en nuestro pais, y como siempre, las distribuidoras españolas acertaron con el día, estrenándola el mismo fin de semana que 8 apellidos vascos, que ha arrasado en taquilla llenando las televisiones, radios, periodicos, tostadoras, etc... de publicidad. Con lo cual, después de vender un riñón para comprar las entradas, nos sentamos en una sala medio vacia, con un puñado de curiosos por ver si Matthew McConaughey y Jared Leto se habían trabajado sus Oscars.

Es curioso como este año prácticamente todas las películas que han sido nominadas a los Oscars han sido novelas biográficas adaptadas a la gran pantalla. Pero el proyecto de esta ha tenído un proceso un poco más largo de normal debído a su temática y a la gran implicación de la familia en el realismo de la película.

Dallas Buyers Club nos cuenta la historia de Ron Woodroof, un electricista de Texas, que después de una vida llena de excesos de todo tipo, descubre que ha contraído el virus del SIDA, quedándole, según los médicos, un mes de vida. Ron atraviesa la fase de negación durante una semana, hasta aceptar que está muy enfermo y que necesita ayuda. Pero en una EEUU que está dando los primeros pasos en medicamentos contra el VIH, a Woodroof no le va a ser fácil ni tan siquiera querer curarse.

Ron cruza la frontera de Mexico para conseguir fármacos que en EEUU aún no han sido aprobados, pero que son eficaces contra el virus, lo cual le hace mejorar su salud y querer ayudar a más gente con el mismo problema. Con este fin, y el de ganar dinero, funda el "Club de compradores de Dallas" (Dallas Buyers Club), convirtiendo su casa en un almacen de cócteles de pastillas y sueros que conseguirán que muchos enfermos alarguen su vida.

Como véis la película no tiene una trama muy complicada ni sesuda. Tampoco plantea un gran dilema moral, ni persigue que el espectador se haga preguntas. Lo único que busca la película es mostrar la dura realidad que sufrieron muchas personas con VIH en aquella época (en la actualidad también), debído al control de las empresas farmacéuticas sobre la FDC, que es quien autoriza o no el uso de fármacos en EEUU. La FDC se convirtió en el archienemigo de Woodroof, hasta el punto de tener que usar disfraces o mulas para traer medicamentos que salvaban o alargaban la vida de los enfermos de SIDA.

¿Qué ha supuesto que Matthew McConaughey sea el protagonista? Todo. En una película plana, y sin sobresaltos, es el quien te hace acurrucarte en la butaca y meterte de lleno en la película. A mi me da igual que haya adelgazado 30 kilos, o que se haya cambiado de cara si hace falta para interpretar el papel. Yo lo que necesito para disfrutar de una película es que cuando mire a la pantalla vea un personaje y no a un actor. Y Matthew se ha fusionado con el. Su acento sureño, sus andares, su manera de transmitir una desesperación comedida... Una clase de interpretación a la altura de muy pocos. No sabemos que está desayunando Matthew ultimamente, pero entre esta interpretación, su pequeño papel en El lobo de Walt Street y True Detective, está cogiendo mucha altura. Espero que luego no se desplome. Como anécdota, no fue el primer actor elegido para el papel. Brad Pitt y Ryan Gosling estuvieron encima de la mesa antes que el, pero ambos fueron rechazados por la familia de Ron Woodroof, que vieron en Matthew un reflejo del auténtico Ron.

Matthew parece haber renacido con más fuerza que nunca. Y aún nos queda verle en "Interestelar"

En uno de los momentos cruciales de la historia aparece Rayon, un travesti que también ha contraido el VIH, y que está inmerso en un tratamiento experimental dentro de la legalidad. Woodroof, a pesar de su homofobia, le pide ayuda para conseguir nuevos socios para su club, y entre los dos conseguirán formar un mini-imperio de los fármacos. Este personaje podría haber tenído varios caminos en la película dependiendo de quien lo interpretase. Podría haber sido demasiado forzado, delirante, incluso molesto. Pero el guión llegó (por suerte) a las manos de Jared Leto, que no solo se puso a la altura de su compañero de reparto, sino que, aunque suene muy raro, parece que haya sido travesti toda su vida. Otro 10 para un actor poco habitual que parece haber firmado un pacto con el diablo para no envejecer nunca.

La mala noticia de la película es Jennifer Garner. No sabemos quien le dijo a esta chica que podía ser actriz, pero la engañaron. 

En resumen, una película bastante lineal en cuanto a dirección y guión, sin salirse de lo establecido, sin muestras de querer hacer más, solo de hacer lo correcto o lo justo con la historia. Lo cual, le ha pasado factura a la hora de recoger algún premio internacional más. Pero solo por ver la interpretación de Matthew McConaughey y Jared Leto merece la pena pasar un día sin comer y comprar una entrada de cine.

Enviar por WhatsApp

Este artículo lo ha escrito...

Javi DC

Javi Del Campo (Madrid, 1983). Criado entre Steven Spielberg y Los Héroes del Silencio, de alguna manera estaba destinado a caminar sobre esa pequeña linea que separa al mitómano del friki. Amante... Saber más...